Torneo de debate
¿Qué es un torneo de debate?
Una discusión organizada en forma de competición en la que varios equipos defienden posturas opuestas sobre un tema (moción) con el objetivo de convencer a un jurado de que su argumentación es la más sólida. Más allá de quién tiene razón, lo importante es la calidad del razonamiento, la estructura de los discursos y la capacidad de refutación. También es esencial guardar las formas correctas de educación y respeto para que haya una comunicación correcta y un clima de deportividad.
¿Cómo funciona un torneo de debate?
Cada equipo dispone de un tiempo determinado para exponer sus ideas, responder a los contraargumentos y concluir su defensa. Para ganar, es esencial demostrar claridad, seguridad, lógica y estrategia en la argumentación.
Participar en un torneo de debate fortalece habilidades fundamentales como el pensamiento crítico, la expresión oral, la escucha activa y la capacidad de defender ideas con fundamentos sólidos. No se trata de hablar más fuerte, sino de persuadir con razón y elocuencia.
¿Qué pretendemos con el TORNEO CEPADEBATE?
El Torneo CEPADEBATE nace con una vocación inclusiva y educativa característica de la Educación de Adultos, buscando integrar a estudiantes de diferentes edades y orígenes culturales en un espacio de diálogo, discusión constructiva y aprendizaje.
Sus principales objetivos son:
DIVERSIDAD Y PARTICIPACIÓN INCLUSIVA
La educación de adultos es diversa por definición, abarcando distintas generaciones, culturas y experiencias. Este torneo es una oportunidad para que todos los participantes aporten su voz y su visión, demostrando que el aprendizaje no tiene edad.
EL DIÁLOGO COMO HERRAMIENTA DE APRENDIZAJE Y SOLUCIÓN DE CONFLICTOS
El debate no es una confrontación sin más, sino una herramienta para construir conocimiento, aprender a ver distintas perspectivas y resolver conflictos a través del razonamiento. También fomenta el trabajo en equipo y la cooperación.
DESARROLLO DEL PENSAMIENTO CRÍTICO Y LA EMPATÍA
Participar en debates fomenta la capacidad de análisis, la reflexión y la argumentación con rigor y respeto. Además, obliga a los estudiantes a ponerse en la piel del otro, desarrollando así una mayor comprensión de diversas posturas y realidades.